Los restos de Konar Sandal quedaron expuestos después de las inundaciones de 2001 cerca de Jiroft en Irán. Protegida por imponentes y escarpadas montañas en tres lados, esta joya escondida resultó ser un extenso asentamiento urbano de la Edad del Bronce, construido por un magnífico reino cuya existencia había sido previamente excluida de los anales de la historia.
El Hueso de Ishango es uno de los objetos más antiguos conocidos que puede contener tallas lógicas o matemáticas.
Se estima que tiene entre 200,000 y 400,000 años de antigüedad, algunos dicen que es una formación natural mientras que otros dicen que es claramente creada por el hombre.
Un enigmático descubrimiento de John J. Williams ha planteado la cuestión de la existencia de una civilización prehistórica avanzada.
El descubrimiento de esqueletos gigantes en la isla Catalina es un tema fascinante que ha dividido a la comunidad académica. Ha habido informes de restos óseos que miden hasta 9 pies de altura. Si estos esqueletos realmente pertenecieran a gigantes, podría desafiar nuestra comprensión de la evolución humana y remodelar nuestra percepción del pasado.
El antiguo santuario de la tumba real del Monte NemruEstá envuelto en leyendas y arquitecturas que desafían su remota ubicación en Turquía.
En Mullumbimby, Australia, hay un Stone Henge prehistórico. Los ancianos aborígenes dicen que, una vez reconstruido, este sitio sagrado puede activar todos los demás sitios sagrados y líneas ley del mundo.
Los arqueólogos han descubierto un alijo de espadas romanas depositadas en una cueva en el desierto de Judea.
Los fósiles opalizados son tesoros extraordinarios que se forman cuando las condiciones son adecuadas para la formación del ópalo. El entierro de huesos, conchas o piñas en arena o arcilla puede conducir al proceso de opalización, donde la sílice reemplaza el material orgánico original, creando una impresionante réplica fósil. Estos fósiles opalizados muestran la cautivadora belleza del ópalo y brindan una ventana al mundo antiguo.
La hembra tocharia es una momia de la cuenca del Tarim que vivió alrededor del año 1,000 a.C. Era alta, con la nariz alta y el pelo largo y rubio, perfectamente conservado en colas de caballo. El tejido de su ropa parece similar a la tela celta. Tenía alrededor de 40 años cuando murió.