Momia de lengua dorada encontrada en Egipto

La arqueóloga Kathleen Martínez lidera una misión egipcio-dominica que ha estado explorando cuidadosamente los restos de la necrópolis Taposiris Magna, al oeste de Alejandría, desde 2005. Es un templo que podría ser construido por uno de los descendientes del general de Alejandro Magno: el rey Ptolomeo IV, que gobernó la región desde el 221 a. C. hasta el 204 a. C.

Los restos de Taposiris Magna, en Alejandría
Los restos de Taposiris Magna, en Alejandría © EFE

Es un impresionante centro de restos arqueológicos, donde ya se han encontrado varias monedas con la imagen de la reina Cleopatra VII. Ahora, han encontrado restos más antiguos, de al menos 2,000 años. Se trata de una quincena de enterramientos grecorromanos, con diversas momias, entre las que destaca una muy particular.

La momia de 2,000 años con lengua de oro
La momia de 2,000 años con lengua de oro © Ministerio de Antigüedades de Egipto

Las momias encontradas allí se encontraban en mal estado de conservación, y uno de los aspectos que ha tenido mayor repercusión internacional ha sido que se encontró una lengua de oro en una de ellas, la cual fue colocada allí como elemento ritual para asegurar su habilidad para hablar. ante la corte de Osiris, encargado de juzgar a los muertos en el más allá.

La institución también informa que una de las momias encontradas contenía cuentas de Osiris doradas, mientras que otra momia llevaba una corona decorada con cuernos y una cobra en la frente. En el pecho de la última momia también se descubrió un collar de oro con forma de halcón, símbolo del dios Horus.

Según el director general del Departamento de Antigüedades de Alejandría, Khaled Abu al Hamd, en los últimos meses también han descubierto una máscara funeraria de mujer, ocho planchas de oro y ocho refinadas máscaras de mármol grecorromano.

Estos son los restos de una máscara que contenía una momia femenina y que se encontraron en las tumbas.
Estos son los restos de una máscara que contenía una momia femenina y que fueron encontrados en las tumbas © Ministerio de Antigüedades de Egipto

La expedición egipcio-dominicana lleva más de 15 años peinando la zona porque esperan descubrir la tumba de la mítica Cleopatra. Según la historia, el faraón se suicidó cuando un áspid la mordió en el año 30 d.C. después de que su amante, el general romano Mark Antony, se desangrara en sus brazos. Al menos esta es la versión oficial que ha surgido de los textos de Plutarch porque también se sospecha que pudo haber sido envenenada.